
Cuando los conductores se chocan se genera un arco violento, parte de los conductores se funden, al igual que los fusibles y el interruptor se dispara. Al introducir una resistencia adicional al sistema limitando la cantidad de corriente que puede fluir, teniendo en cuenta que debe ser menor a la capacidad de disparo del fusible o del interruptor. Esto permite que si el foco toca ambos conductores se ilumine, y si ambas terminales tocan el conductor blanco nada sucede. Al igual que si el foco toca la tubería nada pasa. Por tanto, el conductor blanco se puede manejar de manera segura, siempre y cuando no se trabaje el conductor negro en simultánea.
La tubería de la cocina y el conductor blanco tienen algo en común, están aterrizados. Cuando se conecta un conductor a una varilla de cobre introducida en la tierra, queda aterrizado. El neutro, conductor blanco, está puesto a tierra si se instala por la compañía suministradora de energía. Entonces, se entiende que la corriente fluye del conductor negro a través de cualquier superficie conductora aterrizada, y se puede manejar con seguridad si no se toca con el conductor blanco o con cualquier elemento puesto a tierra. Este tipo de sistema eléctrico se denomina: Sistema de distribución eléctrico puesto a tierra.