Las instalaciones de la salud juegan un papel muy importante y significativo en la mitigación de desastres debido a su particular función en el tratamiento de heridos y enfermedades. Los hospitales y clínicas requieren consideraciones especiales en relación con la mitigación de riesgos debido a los siguientes factores:
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Por lo expuesto anteriormente, esta compleja instalación requiere en forma permanente de suministro de electricidad, agua potable, de servicios de eliminación de deshechos líquidos y sólidos, de servicios de comunicación. Sin embargo, todos ellos constituyen a la vez amenazas, ante la eventualidad de presentar fallas en su almacenamiento, manipulación, utilización, mantenimiento de equipo o por situación de movimientos sísmicos, incendios, explosiones u otros, que podrían afectar al personal, la dotación y los equipos así como al edificio mismo en un momento dado. |
- El tratamiento de los pacientes debe continuar durante la ocurrencia de un evento peligroso: provisiones deben ser realizadas por el personal y los servicios de soporte deben estar realmente disponibles en todo momento.
- La protección de todos los ocupantes debe estar asegurada. Se debe hacer un análisis de vulnerabilidad de las instalaciones y, si es necesario, la instalación debe ser reforzada de acuerdo con los requisitos actuales de diseño y construcción.
Considerando que la red eléctrica hospitalaria juega un papel importante en la mitigación de los desastres, desde un comienzo se deben tener en cuenta el diseño y los lineamientos de la normativa vigente para la ejecución y puesta en marcha de dicha red.